Hay mucho escepticismo alrededor de esta práctica. Sin embargo, ha resultado tan poderosa para reducir el estrés y la ansiedad que vale la pena hablar de tapping.
Tapping se refiere al golpeteo que se hace en ciertos puntos del cuerpo para estimular el sistema nervioso y combatir lo mismo ataques de ansiedad que traumas del pasado. Se trata de una técnica que reúne aspectos de la medicina tradicional china con elementos de la psicología moderna.
Si ves a alguien haciendo tapping en su escritorio a media jornada laboral, quizá pienses que está perdiendo la cabeza. Todo lo contrario. Tiene sus raíces en la acupuntura y la acupresión y puedes practicarla cuando sea, donde sea.
Hacer tapping consiste en identificar una preocupación en particular y valorar del 1 al 10 el nivel de ansiedad que produce. Inmediatamente después, se procede a golpear (suavemente) con las puntas de los dedos índice y medio los siguientes puntos del cuerpo:
La cabeza, las cejas, el costado del ojo, la parte inferior de los ojos y la nariz, el mentón, la clavícula, el pecho y el costado o debajo de las axilas. Y es así como, a través de tapping, hacemos un llamado al sistema límbico.
Si tenemos presente un evento traumático, vinculamos esta nueva experiencia con la memoria y rompemos el vínculo entre la memoria y un recuerdo de lucha o huida. Por eso el tapping ha resultado tan efectivo para tratar el trastorno de estrés postraumático.
Después de unos 5 minutos (y de pasar, de preferencia, por los 9 puntos esenciales del tapping), solo nos queda volver a valorar el nivel de ansiedad. En el mejor de los casos, habrá disminuido. Por supuesto, es esencial acompañar la práctica de silencio y una respiración controlada.
Hay quienes dudan de que una serie de toques puedan sanar síntomas físicos y emocionales, mientras hay quienes aseguran que a través del tapping pudieron eliminar malos hábitos e, incluso, superar adicciones.
No importa si abordamos el tapping desde un enfoque energético o desde un enfoque neurológico, su fama sigue creciendo y con justa razón. Se trata de una técnica que no tiene contraindicaciones y que, además, no requiere de ninguna inversión.
¿Te animas a probarla?
Te comparto un interesante material donde Cipriano Toledo, introductor del tapping en España, habla de la técnica y sugiere 13 puntos con los cuales trabajar: