No me juzgues antes de leer. Creo en el amor y en las relaciones de pareja, pero también creo que hay razones equivocadas para iniciar una relación. Muchas.
La cuarentena, por ejemplo, se ha convertido en el pretexto perfecto para reciclar amores. Quizá estás genuinamente preocupado por tu expareja, por su salud y la de su familia, pero lo más probable es que te estés sintiéndote tan sola que eres capaz de pasar por alto todas las razones por las que terminaron.
Y ya sea que se trate de nuevos romances o de viejos amores, lo ideal es salir con otra persona porque hay un interés compartido, puro, sin presiones ni intereses vanos (o maquiavélicos) de por medio.
Si estás obsesionado en tener pareja, quizá debes detenerte y echar un vistazo a esto:
La soltería es traicionera. Y que quede claro que no uso el término “soledad” porque, entonces, estaríamos hablando de un estado de aislamiento total. Si inicias alguna relación para llenar un vacío emocional, ¿qué vas a hacer cuando esa persona se vaya?
Un clavo no saca otro clavo. Otra de las razones para no tener pareja es tratar de reemplazar a un amor con otro y, en realidad, no sé si debería usar la palabra “amor”. Las relaciones rebote resultan emocionalmente peligrosas y desgastantes. Vive tus duelos.
Para que tu tía deje de preguntarte por el novio. Yo también cometí el error de presentarle al susodicho con tal de que me dejara en paz y, pues, no funcionó. Te van a preguntar por el novio, cuándo te casas, cuándo el primer hijo… ¿y el segundo?
Para encajar. Eres la única soltera del grupo y comenzar una relación parece la única opción que tienes para no sentirte desconectada. Te equivocas. Ser diferente está bien, hacer tus propios planes y hasta buscar nuevos amigos también.
Así me dejan de ver como un “peligro”. Así es, también pasé por ese incómodo momento en el que algunas mujeres me veían con ojos de pistola (amo esta expresión) por el simple hecho de saludar a su pareja. Triste pero cierto.
Cualquiera de estas razones para iniciar una relación es un fracaso seguro. Y lo peor no es que el romance termine, sino la forma en la que dañas más y más tu autoestima. Así que ama cuando estés lista, no cuando estés sola.
