Si terminó el día y sientes que no te dio tiempo de hacer nada, estás gestionando mal tu tiempo y energía. Para mejorar tu productividad tienes que volver a lo básico: cuida de ti y establece rutinas. ¡Ah! Y empieza por quitarte la pijama.
La clave para ser más productivo está en los hábitos y la búsqueda (y práctica) constante del equilibrio entre cada una de nuestras necesidades, es decir, tan importante es cumplir con nuestro jefe como con nuestro sistema digestivo.
Todos queremos hacer más en menos tiempo y, en ese afán, nos exigimos de más. Así que es un buen momento para entrenar aptitudes y actitudes para aumentar nuestra productividad sin tanto rollo:
- Desayuna. El desayuno precede las horas del día de mayor actividad y, por lo tanto, mayor gasto energético. Como un extra, bebe un smoothie verde en ayunas, no hay mejor manera de alimentar tu mente y cuerpo que consumiendo una bebida alcalinizante apenas despertando.
- Diferencia entre lo importante y lo urgente. Como parte de una planificación semanal o mensual, aprende a priorizar. Crea un ranking y de acuerdo a tus objetivos personales y profesionales, define qué harás primero y qué después. Tu productividad aumentará
- Evalúate. Pero de forma amable, es decir, mide los resultados que has logrado y no el gran número de horas que has dedicado a una tarea, porque eso no quiere decir que has sido más productivo.
- Aléjate de la tentación. Y lo mismo me refiero a los alimentos que a los hábitos que solo restan. Deja Instagram de lado y dale la atención que merece a cada una de tus actividades, evita errores. Métodos como Pomodoro son grandes aliados para mejorar tu productividad.
- Duerme suficiente. No hay manera de que seas productivo si tomas conciencia de que tu cuerpo necesita descansar y reponer energías. Si duermes poco, se ve afectada la atención, la concentración, la memoria y el rendimiento en el trabajo.
De lo contrario, se reduce tu rendimiento, tu creatividad, la capacidad de tomar buenas decisiones, tu concentración y, créeme, vas a estar de muy mal humor. Así que por tu bien y por el de quienes te rodean, duerme bien. El sueño tiene vínculos con la productividad.
Cuidar de ti es el primer paso para ser más productivo, más feliz, para pasarla bien hagas lo que hagas. Escúchate y verás que te encuentras con una nueva forma de éxito.