Se trata de una serie de señales de inmadurez, incongruencia o desinterés que la otra persona nos da, casi siempre de forma inconsciente. Pon atención, quizá tu relación vaya directo al fracaso.
Voy a enlistar una serie de comportamientos que suelen predecir el fracaso de una relación. Y no me refiero a una receta infalible pero sí a una guía que visibiliza señales de una pareja tóxica.
También es mi deber advertirte que puede ser que estos focos rojos tengan que ver más contigo que con el otro. En ese caso, por favor no dejes de leer. No eres la mala del cuento, solo estás lastimada (y algo tendrás que hacer para sanar).
Y, por supuesto, vale la pena dejar bien claro que las conductas que dañan una relación pueden presentarse lo mismo en una mujer que en un hombre y, sin duda, tanto en una relación heterosexual como entre una pareja homosexual. Vamos al grano:
Va y viene. Si pasan un día maravilloso juntos y luego desaparece una semana, abre bien los ojos. Puede ser que tenga otra u otras relaciones, pero también puede ser que no tenga idea de lo que quiere y le resulte bastante conveniente tenerte como su velita encendida.
Si esto te molesta, no lo dejes pasar. Una relación es de dos. Háblalo y negocia. Pero si no están yendo a ningún lugar, termina con esa relación antes de que termine contigo.
Es impredecible. Nunca sabes cómo va a reaccionar. Puede ser el más tierno y al minuto siguiente explotar de ira. Tienes que andar con mucho tiento para evitar una discusión. Probablemente se trate de un trastorno de salud mental.
En este tipo de relación, los focos rojos se evidencian en ambos miembros de la pareja. Si su comportamiento es tóxico, ¿qué haces ahí?
No le agrada a la gente que más te quiere. Hablamos de aquellos con quienes tienes un vínculo afectivo importante. Cuando estamos enamorados no vemos los defectos del otro, así que vale la pena que escuches a quienes quieren lo mejor para ti.
Es importante que tomes en cuenta las opiniones si y solo si tienes una relación sana con estas personas. También hay familiares y amigos manipuladores.
Es controlador. Si no eres libre de ser tú misma, algo anda mal. Los celos y las tácticas para alejarte de tus amigos y familiares son síntomas de dependencia emocional.
Cuando hay patrones de conductas y pensamientos obsesivos y compulsivos en tu relación, puedes apoyarlo pero nunca a costa de tu seguridad emocional y física.
Un pasado demasiado misterioso. Aunque debemos respetar la privacidad individual en la pareja, si hay comportamientos sospechosos y demasiados secretos, hay que prestar atención a los focos rojos.
Suele suceder que, además, no te presenta con sus amigos y familiares, no te incluye en sus planes. Su relación te hace sentir muy insegura. Parece que tiene otra vida.
Puedo seguir y seguir, hay una serie de señales de fracaso en una relación que, usualmente, vemos con claridad solo con el paso de los años (y los daños).
Así que, además de alejarnos de quien nos lastima, es fundamental preguntarnos por qué nos lastima y sanar la relación que tenemos con nosotros mismos y nuestro pasado antes de seguir sumando más y más relaciones destructivas.