No te sientas tan mal, no eres el único. En momentos como este, pensamos que todo tiempo pasado fue mejor, pasamos por alto algunos detalles tóxicos y aparece la idea de contactar a un ex (o a varios).
Se trata de un fenómeno que está cobrando importancia durante esta larguísima cuarentena. Y es que entre el aislamiento, el miedo y la ansiedad, tendemos a buscar compañía a como dé lugar. Un ex es “la vieja confiable”. Literal.
La nueva normalidad nos ha golpeado con rudeza y, como sabemos que no es posible volver al pasado, nos permitimos traer el pasado al presente. Así es como se combate el aburrimiento y ese complejo sentimiento de soledad.
El único detalle que quizá no has tomado en cuenta es que estás a punto de abrir la caja de Pandora. Quizá tu ex está esperando todo menos un mensaje tuyo y que termines bateado puede resultar bastante más doloroso que un domingo de desconcierto.
En el peor de los casos, él o ella está más perdido que tú y entran, solo por pasar el rato, en el mismo círculo vicioso que hace más o menos tiempo terminó separándolos. La nostalgia es tramposa.
Habrá quienes tengan más suerte y vuelvan a encender la llama del amor. Pero, seamos honestos, es poco probable. Y no es que no crea en la magia del romance, más bien creo que estar con alguien para no estar solo es la peor de las traiciones (a ti mismo).
Tu ex pudo haber sido una gran pareja, pero analiza muy bien las razones por las cuales la quieres (o lo quieres) de nuevo en tu vida. Si es el amor el que te mueve, ¡vas! pero si notas que estás actuando desde el terrible “peor es nada”, no mandes ese mensaje.
Y si leíste este texto demasiado tarde, tampoco pasa gran cosa, siempre puedes echarte para atrás. Habla con tu psicólogo, a la larga te va a salir mucho más barato.
