Sin importar si tus metas son personales o profesional, no hay nada mejor que dedicarle tiempo a una buena planeación para alcanzar tus metas sin tanto rollo. Empieza preguntándote qué es lo que quieres conseguir y por qué lo quieres conseguir.
Si conoces a fondo las razones por las cuales quieres lograr tu meta será más difícil que desistas cuando las cosas se pongan duras. Aunque estemos ya a mitad del 2022, nunca es tarde para replantear tus propósitos de principios de año y cumplirlos. Y estas son las claves:
- Automotivación. Piensa en tu vida ideal y escribe cómo se ve, cómo se siente, incluso cómo huele. Visualiza tu motivo y enfócate en él. Puedes crear un vision board para no perderlo de vista (literal) y alcanzar tus metas.
- Un objetivo realista. Debes considerar el contexto en el que te encuentras y las herramientas con las que cuentas. Asegúrate también de que tus objetivos sean tangibles y medibles.
- Identifica tus áreas de oportunidad. Tienes el potencial para lograr lo que sea que tengas en mente, pero por supuesto que siempre hay algo que se puede mejorar. Por eso, afronta tus miedos y atiende justo esas áreas de oportunidad para alcanzar tus metas.
- Adáptate. Sin importar si eres un empleado o un emprendedor, una de tus grandes fortalezas será fluir con el cambio. Si una estrategia no está funcionando, no te estanques en los porqués, haz un breve análisis y diseña un nuevo plan de acción.
- Confía en ti. Nada más importante que la seguridad, así que cambia tu lenguaje. Si de pronto te cachas diciéndote algo como “nada me sale bien”, toma conciencia y elige en su lugar una frase como “estoy aprendiendo”. El lenguaje no es inocente y, si lo usas sabiamente, te ayudará a alcanzar tus metas.
Tu motivo es el que te va a mantener en pie, haces lo que tienes que hacer porque quieres conseguir un objetivo y no porque hayas amanecido con una mágica fuerza de voluntad que te mueve casi en automático.